No nos gustan nada estos dúos interdimensionales en los que alguien del más allá se alía a un artista vivito y coleando para seguir manifestándose en el planeta Tierra. Además de dar bastante mal rollo, no es muy correcto.
Pero Michael Jackson sigue dando pasta, y muerto mucha más que en sus últimos años vivo. Así que, si además de tapar el agujero que dejó en sus cuentas se puede sacar algo extra para Navidad, mira qué bien.
El elegido para poner presencia física al tema es nuestro featuring universal, Akon que, además, aparece en los créditos. Porque esto iba destinado a Whitney Houston, pero se perdió por el camino y ha terminado de single navideño.
Este tema (y toda su controversia) pasa desde ya a engrosar la larga lista de singles de Michael Jackson. Una lista en la que este no destaca especialmente, ni por calidad ni por ventas. Y mejor no hablamos de expectativas.