No vamos a ocultar una especial predilección por KT, ni por todo lo que se autoproclama raro, pero en este caso la conjunción ha resultado algo decepcionante.
Una de las grandes aportaciones escocesas de los últimos tiempos, después de dos buenos trabajos con singles como
"black horse and the cherry tree" o "saving my face" y temazos de relleno como "funny man", no puede abrir álbum con un sonido que apenas se diferencia de un mal rippeado de la radio. Katie nos gustas más cuando te cuelgas el bajo de brillantes.