El que en un principio iba a ser single solo en algún país, y por imposición en España, finalmente es el segundo single para Europa. Su discográfica prueba suerte con este, tras el medio-fracaso del "We are golden".
Si The Boy Who Knew Too Much fuese el primer disco de Mika, estaríamos hablando de una promesa que empieza a hacerse oir. Pero con el precedente de Life In Cartoon Motion y unas 60.000 copias que habrá vendido, este nuevo disco pinta bastante mal.
No lo terminamos de comprender. Quizás ninguno de los dos singles son tan buenos como los del primer álbum, pero no nos parece motivo para que Mika pase de un extremo al otro.